Laura Vichera | 27 de septiembre de 2014 a las 8:13
PARA EL RELLENO
En primer lugar, preparamos la masa. Tamizar la harina en un cuenco, haciendo un hueco en el medio, donde agregamos el huevo ligeramente batido y también el resto de ingredientes. Mezclar con varillas.
Cuando la masa se pueda trabajar, amasamos con las manos, formar una bola y la dejamos reposar unos quince minutos, tapada con un trapo limpio.
Mientras, dejamos los orejones de tomate en un cuenco con agua templada para que se reblandezcan. Precalentar el horno a 180 grados.
En un cuenco, batimos el huevo con una pizca de sal y pimienta negra. Incorporar las aceitunas muy picadas y el queso rallado. Agregar también un pellizco de orégano y algunas espigas de romero muy picadas. Secar los tomates, los cortamos en trocitos pequeños y los añadimos también a la mezcla anterior.
Vamos estirando la masa, dejándola muy fina, con un milímetro de espesor. Vamos cortando discos no muy grandes y en el centro de cada uno de ellos colocamos una cucharada de relleno. Cerrar y presionamos con un tenedor.
Las vamos colocando sobre una bandeja forrada con papel sulfurizado, pintamos con la cucharada de leche mezclada con la yema y hornear durante quince minutos. Servir enseguida y acompañar con una ensalada.
Laura Vichera | 30 de diciembre de 2013 a las 8:13
Una vez limpia de grasa, aplanar ligeramente los filetes y se pican a cuchillo, primero en tiras y luego en dados. Dejar los orejones de tomate en remojo en el caldo templado para que se hidraten.
En una sartén antiadherente, a fuego suave, calentamos unas cucharadas de aceite de oliva con la mantequilla y rehogamos las cebolletas picadas muy finas y el pimiento amarillo picado del mismo modo. Vamos moviendo durante unos cinco minutos.
Cuando estén blanditos, incorporar la carne y subir un poco el fuego para que se dore. Agregar los pimientos de Piquillo bien escurridos y dejamos que se evapore todo el jugo, agregar el pimientón, sal y una pizca de pimienta molida. Volcar en una fuente y dejamos templar.
A esta mezcla, añadimos las aceitunas cortadas en rodajitas y el huevo duro picado. Incorporar también los orejones de tomate en tiras. Precalentamos el horno a 200 grados.
Sobre cada una de las obleas vamos colocando una cucharada de relleno, humedecer el borde de la masa, cerrar y presionar con un tenedor. Se van colocando sobre una bandeja forrada con papel sulfurizado y pintamos con la leche.
Una vez hechas todas las empanadillas, hornear unos doce o quince minutos. Deben quedar doraditas y crujientes. Servir recién hechas y acompañar con un coulis de tomate y albahaca.
Laura Vichera | 2 de noviembre de 2013 a las 8:13
Una vez limpia la calabaza de piel, semillas y hebras la cortamos en daditos pequeños que dejamos en un escurridor. Pelar y picar las cebollas muy menudas y se ponen en una sartén amplia con un chorrito de aceite de oliva.
A fuego suave, pochamos hasta que estén blanditas. Incorporar a continuación los dados de calabaza y el culantro muy picado. Subir ligeramente el fuego y procuramos que la calabaza se dore ligeramente sin que se ablande en exceso.
Justo antes de apartar, espolvorear el pimentón y añadir una pizca de sal y pimienta molida. Volcar en un cuenco y dejamos templar.
A continuación, en la misma sartén, salteamos a fuego fuerte el chorizo cortado en tiras o en taquitos, un par de minutos y se saca a escurrir sobre papel absorbente. Lo incorporamos luego al sofrito de calabaza y mezclar. Precalentar el horno a 210 grados.
Sobre cada una de las obleas colocamos unas cucharaditas de relleno, humedecer el borde de la pasta y cerramos, presionando con un tenedor. Se van colocando sobre una bandeja forrada con papel sulfurizado.
Por último, batir el huevo y las vamos pintando. Espolvorear con el sésamo y hornear durante diez minutos. Bajar luego la temperatura a 200 grados y proseguir el horneado cinco minutos más.
Servir recién hechas y acompañar con una ensalada de lechugas variadas.
Laura Vichera | 28 de septiembre de 2013 a las 8:13
En una sartén amplia con muy poco aceite de oliva, preparamos un sofrito con las chalotas picadas muy finas, a fuego suave y sin dejar de mover para que no se doren en exceso.
Cuando comiencen a estar blanditas, incorporar las dos manzanas cortadas en dados pequeños y saltear brevemente, hasta que tomen color. Sacamos a un bol, agregar una pizca de pimienta recién molida, sal y dejamos templar.
A continuación, precalentamos el horno a 200 grados. Cubrir una bandeja con una hoja de papel sulfurizado. Sacar el hojaldre del frigorífico y dejamos atemperar ligeramente.
Al sofrito de manzana y chalotas añadimos la sobrasada cortada en daditos y mezclamos, procurando que quede desmenuzada y bien trabada.
Sobre la encimera, extender el hojaldre y, con ayuda de un vaso o un cortapastas, vamos sacando círculos del tamaño que más nos guste. En el centro de cada uno de ellos, colocamos unas cucharadas de relleno y doblar la masa para cerrar humedeciendo los bordes que presionamos para que no se abran al hornear.
Se van colocando en la bandeja, pinchamos para que salga el vapor y los pintamos con la leche batida con la yema y una pizca de pimentón. Espolvorear las semillas de amapola y hornear durante diez minutos.
Por último, bajamos la temperatura a 180 grados y hornear cinco minutos. Servir templadas y acompañar con una ensalada de lechugas variadas.
Laura Vichera | 10 de marzo de 2012 a las 8:13
En una sartén amplia calentamos la cucharada de mantequilla con un chorrito de aceite de oliva y rehogamos el puerro y las cebolletas picadas muy finas, a fuego suave para que se hagan sin dorarse.
Cuando estén blanditas, incorporar la carne, la hierbabuena picada y saltear a fuego vivo, desmenuzando con una espátula para que quede bien suelta.
Apartar del fuego, agregar una pizca de sal, pimienta y pimentón, volcar en un cuenco y dejamos templar. Precalentar el horno a 200 grados y forrar la bandeja con papel sulfurizado.
A la mezcla de carne, una vez fría, incorporamos el huevo batido y mezclar bien. Agregar también las nueces desmenuzadas y la manzana rallada y trabajar con un tenedor hasta que todo quede bien trabado.
Sobre la encimera, extender el hojaldre y cortamos cuadrados del mismo tamaño. En el centro de cada uno de ellos, colocamos unas cucharadas de relleno y doblar la masa para cerrar humedeciendo los bordes que presionamos para que no se abran al hornear.
Se van colocando en la bandeja, pinchamos para que salga el vapor y los pintamos con la leche batida con la yema. Horneamos durante diez minutos y luego bajamos la temperatura a 180 grados y hornear cinco minutos. Servir recién hechos acompañados de una ensalada.